Como cada día, Cristina ha cogido el metro para dirigirse a su lugar de trabajo. Unos quince minutos de trayecto que aprovecha para contestar algún mensaje y revisar sus redes sociales. Una noticia compartida por un amigo desde un medio desconocido le llama especialmente la atención por su contenido alarmista. Después de realizar una búsqueda en internet, comprueba que se trata de una fake news.
Tres populares plataformas retiraron solo en el pasado mes de junio más de 100.000 mensajes por promover la desinformación sobre la pandemia del coronavirus. Cristina, como muchas otras personas, se preguntan qué pueden hacer para combatir la información engañosa, un problema cada vez más frecuente, que puede acarrear consecuencias negativas e incluso afectar a la salud de las personas.
El paso más importante ya ha sido dado: aproximarse con escepticismo y leer entre líneas para detectar argumentos débiles. A continuación, le indica a su amigo, con tono respetuoso, que se trata de una noticia falsa. Su amigo la elimina y se disculpa por haber difundido dicho contenido. Con este pequeño pero adecuado gesto, Cristina ha conseguido cortar una de las ramificaciones de un bulo que iba a ocasionar confusión y malestar entre las personas que lo lean. ¿Qué pasaría si otras personas actuasen de la misma manera?
Ser capaces de filtrar hechos en un mundo complejo con exceso de información es una de las herramientas que podemos poner en práctica en nuestro día a día para contribuir a un mundo mejor. El reto consiste en saber cuándo aplicarla en nuestras acciones cotidianas.
Promover el cambio colectivo desde la acción individual
Lo que compartimos en las redes sociales, las compras que hacemos, dónde y cómo elegimos trabajar o qué organización sin ánimo de lucro decidimos apoyar como voluntarios o donantes. Son muchas las maneras de aportar valor social. El Civic Circle, impulsado por Points of Light, identifica los diferentes retos y oportunidades de participación individual y los reúne en nueve formas en las que las personas podemos contribuir a mejorar el mundo y promover un cambio colectivo: voluntariado (volunteer), compra responsable (purchase power), votar a conciencia (vote), trabajar según valores éticos (work), alzar la voz (voice), donar (donate), escuchar y aprender (listen and learn), servir (service) y el emprendimiento social (social entrepreneur).
Con el objetivo de generar encuentros de reflexión en torno a cada una de estas herramientas, hemos puesto en marcha el proyecto “Civic Circle Discussion Series”, de la mano de Volunteer Ireland y con el apoyo de Points of Light. El proyecto consiste en nueve sesiones de trabajo en las que participan alrededor de 20 personas de España e Irlanda del mundo de la RSC, del voluntariado y de las organizaciones sociales.
Escuchar y Aprender, una herramienta poderosa
En la primera de las sesiones hemos abordado una herramienta realmente interesante por su gran potencial, puesto que la podemos poner en práctica de diferentes maneras en nuestro día a día. Escuchar y Aprender es un aspecto clave del compromiso cívico, la habilidad individual de estar informados, pensar de manera crítica y educarnos a nosotros mismos antes de actuar. Para ello, debemos abrir nuestra mente y dejar de lado ideas preconcebidas para entender a los demás desde la empatía.
El Civic Circle es una teoría disruptiva que va más allá del voluntariado, en el que nos hemos centrado tantas organizaciones durante mucho tiempo. La colaboración con empresas y organizaciones de Irlanda de la mano de nuestro partner Volunteer Ireland, confiere un mayor calado a este nuevo proyecto que traspasa nuestras fronteras para impulsar colaborativamente el cambio social.
En los próximos días compartiremos los aprendizajes y reflexiones resultantes de cada sesión. De momento os invitamos a profundizar en cada una de las temáticas a través de los magazines que Points of Light pone a nuestra disposición en su web, donde, además, encontraréis planes de acción personal que os animamos a llevar a cabo.
